Cambiando el Rumbo

Como cuesta virar el timón y cambiar el rumbo de tu vida. De esa vida que has ido construyendo y eligiendo, y que además te creíste que si, que habías llegado al momento y al lugar correctos. Hasta que un día, y otro, y otro... sientes una insatisfacción por todo y por nada, un no sé qué y un qué sé yo y  tristeza y mala leche... y te das cuenta que te equivocaste, que en algún punto perdiste el camino. Pero sigues ahí, en el lugar al que llegaste, y te das, y te dan, mil razones para continuar en ese punto, es lo cómodo y sobre todo, es lo seguro, ¿o no?.
Yo he cambiado el rumbo, un leve giro al timón, a ver dónde me lleva...

Y para ilustrar este pensamiento ahí os dejo mi Margarita Marinera.